Debo ser más amable y menos crítico conmigo mismo
No debo culparme si bebo cafés adicionales, o por comprar algo tonto que no necesito.
Ya gané el derecho a ser desordenado y extravagante.
Aprendí que
Ya muchos amados amigos dejaron este mundo, sin gozar la libertad que conlleva llegar a la vejez
Por ello, ¿Quién reprochará si decido amar a mi computadora hasta las 3 de la mañana y luego dormir hasta el mediodía?
Aprendí que
Como reiteradamente olvido cosas, digo, siempre hay cosas en la vida que deben olvidarse
Aprendí que
A lo largo de los años, mi corazón roto lloró por un amor perdido!
Pero los corazones rotos dan fuerza y renovación.
Un corazón que nunca sufrió es inmaculado y estéril,
nunca conocerá la alegría de ser imperfecto.
Aprendí que
Tengo la suerte de haber vivido lo suficiente como para teñir mi cabello gris y grabar en mi cara surcos profundos con mi juvenil risa.
Aprendí que
No viviré para siempre,
pero mientras aún esté aquí,
no perderé tiempo lamentando
lo que pudo haber sido
o preocupado por lo que será
Aprendí que
Ya no me cuestiono.
gané el derecho a estar errado.
Me gusta la persona
en la que me convertí.
Con el tiempo también